viernes, 28 de noviembre de 2008

Naranjeando

Vivimos en una aldea de Murcia, entre naranjos y limoneros, y desde nuestra habitación se ven las montañas...
Muchas mañanas, mi chica y yo nos levantamos un poco antes, cogemos a la perra, y nos vamos a pasear por el campo. Hace bastante frío y hay que ponerle voluntad, pero merece la pena: nos damos cuenta de la suerte que tenemos de vivir aquí. Hasta hace casi un año, vivíamos en un piso en el centro de Murcia, y la verdad, hasta que no vinimos, no creía que me gustase tanto vivir en el campo.
Las buenas conversaciones, el paisaje, el contacto con la naturaleza, el solecito del invierno...
He de confesar una cosa: solemos coger dos bolsas, que a la vuelta llenamos de naranjas y algún que otro limón peeero.... siempre de lugares sin vallar de esos que ya no cuidan.
Para mí esto es un lujo, me hace sentirme agradecida por tantas cosas...

3 comentarios:

Lucía dijo...

Que envidia...algún día tendremos una entrada así en nuestro blog donde compartamos los paseos con nuestros peques... :)

Las mamás de Ovulín

AlbaySusana dijo...

Muchas gracias por vuestros comentarios, chicas!
Me ha hecho mucha ilusión que hayais pasado por mi blog. Os deseo toda la suerte del mundo en vuestra aventura de ser madres.
Vosotras sí que me dais envidia a mi, pero todo a su tiempo....

niobeia dijo...

Que bonita la huerta murciana.......y con que facilidad la estan asesinando. Sois unas privilegiadas y como sigamos a este ritmo, vais a tener que guardar vuestro tesoro como oro en paño.
Que envidia despertar entre naranjos...yo tb vivo en un pueblo, pero es practicamente barrio, Murcia nos ha engullido, cada día nos quedan menos trocitos de huerta y más lejanos de mi casa....que pena

Un saludo medio triste medio alegre, me da mucha pena ver como crecen los ladrillos y disminuye la huerta